jueves, 7 de febrero de 2013

Fútbol, barro y colonia


Antes de 2008 también se pasaba el balón. Antes de 2008 también se marcaban goles. Antes de 2008 también se podía disfrutar de un buen partido de fútbol. Antes de 2008 hubo equipos que jugaron muy bien a este deporte, convirtiéndolo en el más popular del mundo, defendiendo distintos estilos que les llevaron al éxito. Parece obvio, ¿no? Pues para muchos no lo es tanto.


El fútbol como lo conocíamos antes está desapareciendo, y no puedo ocultar la tristeza que me produce. Más allá del negocio de dinero e intereses en que se ha convertido, situación que acabará volviéndose insostenible, el deporte rey ha cambiado mucho en los últimos tiempos.


Llevamos cuatro años (desde la Eurocopa del 2008 y el primer Barcelona de Guardiola) en los que se ha asentado la idea de que el ÚNICO buen fútbol es el que se basa en el (maldito) "tiqui taca", que alimentado por todas las buenas críticas recibidas y los resultados obtenidos ha ido degenerando en lo que es ahora:  Una especie de "Catenaccio contemporáneo" que consiste en tener el balón con el objetivo de que no lo tenga el rival, sin atacar, sobre todo cuando van ganando el partido. La Selección de Aragonés no era eso. Tampoco el primer FCB de Guardiola, que jugaba con Yaya Touré en el medio y con Eto'o y Henry arriba, antes de que se inventase eso de jugar sin delanteros.

A mí siempre me ha gustado más el fútbol vertical que el horizontal, y el fútbol directo del Real Madrid me gusta más que el "tiquinaccio", pero eso no quiere decir que el Barcelona y la Selección Española jueguen mal. Juegan a su estilo.






Evidentemente, el resultado que ha dado ese juego tanto al Barcelona como a España está fuera de dudas, y es un estilo que aunque no me guste, respeto. Sobre todo porque pienso que un equipo tiene que explotar sus recursos de la forma que mejor provecho pueda sacarles. Se puede debatir mucho sobre qué es "jugar bien". Para mí no es más que jugar de la forma que te lleve a la victoria, de la forma en que se aprovechen mejor las cualidades de los jugadores de un equipo.


Es por eso que no entiendo, y no consiento, que se exija a todos los equipos jugar así. ¿Acaso es el primer estilo que tiene éxito? ¿Acaso se ha exigido alguna vez al Barcelona copiar el estilo del Madrid de Di Stéfano, el de La Quinta o el de la época dorada de los Galácticos? No. Y es como tiene que ser. El Chelsea ganó la Copa de Europa el año pasado y nunca había visto un campeón tan despreciado y desacreditado mediáticamente. Me parece una absoluta vergüenza que se critique a un equipo que ganó una Champions en la que, de los 4 semifinalistas era el que peor plantilla tenía. ¿Acaso no tiene un mérito enorme? ¿Acaso podrían haberla ganado de otra forma? ¿Tienen que estar tristes por haberla ganado así? Pero está claro el por qué de esta campaña en su contra: eliminaron al equipo del "tiqui taca", la verdad absoluta del fútbol. Si hubieran eliminado al Madrid otro gallo cantaría. Sólo hay que escuchar lo que se comenta del rival en cada pinchazo blanco. "Hicieron su partido", "usaron muy bien sus armas", "desactivarn el ataque del Madrid". Todo elogios. Es el único caso en el que el "antifútbol", como a ellos les gusta llamarlo (término que rechazo profundamente), está justificado, de hecho dejan de llamarlo así para llamarlo "el otro fútbol". Bastante más light.





Los arbitrajes también han evolucionado, hasta el punto de que están convirtiendo el fútbol en baloncesto. Al mínimo contacto, falta. A la mínima entrada (según quién la haga y a quién se la hagan, claro), amarilla. O roja, según les venga en gana. Estamos hartos de ver amarillas y expulsiones por protestar (sin que haga falta insultar) al árbitro. Entrenadores sancionados con 3 partidos por protestar una decisión. La ley de la ventaja agoniza, cada vez menos árbitros saben usarla. Cada vez se ven menos goles de falta directa, porque los árbitros pasan de colocar las barreras bien. Los goles sin haber dado 50 pases antes ya no venden. Cierto es que la Premier League se resiste al cambio, pero poco a poco cede, y acabará haciéndolo. Como ha hecho la Champions, que ya se ha entregado a la protección del "juego de toque". Porque está claro que si a alguien beneficia que se pite falta al mínimo roce es a quien soba el balón durante el 75% del tiempo mareando al rival.


A la hora de entregar premios individuales ya no se premia a los mejores jugadores sin más. Como criterio para votar el Balón de Oro se incluyó recientemente la personalidad y el carisma del jugador. También los entrenadores tienen que ser simpáticos, o parecerlo, si quieren ser reconocidos. En términos de reconocimiento casi es más importante la imagen que se vende que lo que sucede en el terreno de juego. Por favor, que esto es fútbol, no ballet.


Recuerdo con cariño un Real Madrid-Valencia en el Bernabéu de la temporada 2002-2003. Uno de los mejores partidos que nos dejó Zidane, si no el mejor. Barro, goles, broncas, polémica... Y buen fútbol. Un partidazo. Jugadores de la talla de Roberto Carlos, Figo, el mejor Raúl, Zidane o Ronaldo con las camisetas empapadas, y medias y pantalones llenos de barro jugando al ataque y marcando 4 goles a un Valencia que no era lo que es ahora. Quién sabe, quizá el Madrid no tuvo más posesión que el Valencia, pero aquello era fútbol. Fútbol de verdad.






Por que el, entre otras cosas, fútbol son gritos, insultos, contacto, lucha, garra, táctica, calidad en las adversidades, coraje y defensa de unos colores por encima de lo demás. No sólo "tiqui taca" ni bailarinas cayendo al suelo al mínimo contacto.

El fútbol es barro, no colonia.




P.D.: Un regalo para los nostálgicos:





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