domingo, 25 de diciembre de 2011

La protección de los hipócritas

“Ya estás con los árbitros”. A cualquier madridista que haya hablado con un seguidor del Barcelona (o con un antimadridista) en los últimos años le sonará la frase. Y es que cada vez que les recordamos a Obrevo, Bussaca, Stark, De Bleeckere, Iturralde y demás, una especie de mecanismo de defensa se activa en ellos y actúan como robots. Esa frase la contestan los que en el fondo saben y admiten que esos árbitros les echaron un cable cuando fue necesario, pero no se atreven a reconocerlo de puertas para afuera. Los que se autoengañan y no quieren ver esa incómoda realidad prefieren contestar contraatacando, con el famoso: “Ya estáis llorando” (porque ojo, ellos no lloran, pero prueba a decirles que un árbitro portugués va a arbitrar un R.Madrid - Barcelona, verás qué risa). Pero sin duda, la especie más curiosa y digna de admiración es la que te responde el ya famoso: “con Franco no te quejabas tanto”, pese a haber nacido años después de que Franco muriese. Eso sí, las tres especies coinciden en la continuación de la conversación, todos añaden algo parecido a esto: “el Barcelona juega muy bien al fútbol, es el mejor equipo de la historia, Messi y Guardiola son los mejores del mundo. A ti lo que te molesta es que el Barcelona juega mejor de lo que ha jugado nunca el Madrid. Además son de la cantera, y no gastamos tantos millones como Florentino. Y Mourinho es un impresentable, debería aprender educación de Guardiola, que es un ejemplo”. Sus argumentos se resumen más o menos así. Y puedes extraer que como son muy buenos y juegan muy bien, no está mal que los árbitros les ayuden, que se lo merecen. Y además como Florentino y Mourinho son muy malvados, el Madrid se merece que le perjudiquen. Sinceramente, si no es eso, no sé qué coño están intentando decirnos. 

Ah y se me olvidaba, luego está el culé salomónico, que va de buen rollo, el que te dice “Ni Madrid ni Barcelona se pueden quejar, porque son los grandes y les ayudan más que a los pequeños”. Venga hombre, que  a lo que yo voy es a la comparación entre el trato que recibe el Madrid y el que recibe el Barcelona, y diferencias hay. Déjate el discurso “guardiolano” para cuando estés con tus colegas “humildes”.

Y es que sería absurdo no reconocer que son muy buenos y al fútbol saben jugar. Que Guardiola ha hecho historia, que Messi es muy bueno y que han ganado muchos títulos (casi todos) en los últimos años. Pero siempre hay un “PERO”, ese “pero” que la prensa se empeña en esconder bajo la alfombra y nadie quiere admitir, y estoy harto de que nadie que no sea madridista lo denuncie o lo quiera ver. Y ese “pero” es que el F.C. Barcelona está MUY protegido. De verdad, no sé cómo lo han conseguido, pero lo están, y lo saben. Y lo sabe todo el mundo. Protegido por TODA la prensa (por la de Madrid, tristemente, también), protegido por la UEFA y la Federación, y en última instancia, protegido por los árbitros y comités. ¿Ejemplos? No hace falta que los dé. La prensa no hace falta más que leerla cada día (lo justo en Internet, que a nadie se le ocurra contaminarse más de la cuenta). La actitud de Platini criticando a Florentino por sus fichajes y pidiendo protección para Messi también es evidente. Nominaciones a premios, artículos en revistas oficiales… Y una larga lista de agravios comparativos. De arbitrajes europeos qué os voy a contar que no sepáis. La mejoría en el trato arbitral y por parte de los comités en España desde que está Villar es clara. Podría seguir, pero no quiero que esto se alargue más de la cuenta, todos conocemos la situación.




Y ojo, que no estoy hablando de conspiraciones, de sobornos, de tratos ni de nada parecido, quiero pensar que eso no existe. Estoy hablando de esa especie de inmunidad, esa protección y ese consentimiento de que hagan y digan lo que quieran. Porque caen bien, y ya no sé si caen bien porque la prensa en su día decidió que tenían que caer bien o porque la hipocresía de este mundo ha llegado a un nivel superior. Y es que, tristemente, está más valorada la hipocresía que la verdad y la franqueza. Está más valorado “quedar bien y ser un caballero” que decir las cosas claras sin importar a quién le moleste. Y eso es así.

Guardiola cae bien (por lo que sus salidas de tono se ocultan), el modelo de cantera cae bien (por lo que el hecho de que en 3 de los últimos 4 veranos el Barcelona haya gastado más dinero que el Madrid en fichajes, también se oculta), la humildad vende, aunque sea falsa (por lo que los actos de chulería van también directamente bajo la alfombra). Y en cuanto a arbitrajes… Siempre hago la misma comparación:


En una clase de instituto hay muchos tipos de alumnos, me centraré en dos. Están los “pelotas” que sacan buenas notas, y también están los que sacan buenas notas sin ser pelotas, y que si algún día tienen que quejarse de la nota de un examen, o contra un castigo, lo hacen aunque sepan que el profesor les va a coger manía. Cuando el profesor  va a corregir un examen en su casa, no mira con los mismos ojos el examen del chaval que contesta todas las preguntas y está callado en clase, no protesta por nada, le saluda por el pasillo y “parece que quiere aprender”; que el examen del chaval que estudia y trabaja, pero que un día le dijo que se había equivocado corrigiéndole un trabajo y merecía más nota, llegando a enfrentarse a él, y que además dijo que era injusto que le castigasen a él sin recreo y al de al lado no. Con exámenes parecidos, siempre sacará más nota el “pelota” que el que es sincero y protesta por lo que le parece injusto. Lo mismo pasa con los árbitros. Quién piense que a un árbitro no le afecta la buena o mala fama de los jugadores a quienes arbitran, no ha visto mucho fútbol. No es lo mismo que haga una entrada fuerte Pepe a que la haga Puyol (hombre, que es campeón del mundo y un ejemplo en todo, ¿cómo va a tener mala intención?). Y así con muchos más ejemplos que se me podrían ocurrir.

En resumen, si algún culé lee esto, pensará alguna de las frases que escribí en el primer párrafo, lo tengo claro. Pero estoy convencido de que toda esta farsa acabará algún día, que está protección se desvanecerá en algún momento. Y también tengo claro que en cuanto las cosas no les vayan tan bien deportivamente, perderán mucho apoyo mediático, porque ya se sabe que los medios siempre se suben al caballo ganador. Tengo la impresión de que esto está próximo a acabar, y la mejor forma de que acabe es comenzando a cerrarles la boca ganándoles en el campo, por difícil que sea, y arrebatándoles más títulos. Porque el único equipo capaz de desmantelar el circo que tienen montado y esa burbuja que les protege, es el Real Madrid. Para volver a aquellos tiempos en los que ellos corrían detrás de nosotros, sin alcanzarnos por más que intentasen tirar de nuestra camiseta.

martes, 20 de diciembre de 2011

Interpretaciones

Lo que ha pasado entre ayer y hoy es solamente una muestra de lo que lleva pasando desde que tengo uso de razón. De como la prensa inventa, tergiversa, manipula y cambia las cosas a su antojo para crear polémica y vender periódicos o ganar oyentes. Y también de como los antimadridistas no son capaces de valorar, bajo ningún concepto, una actitud positiva de alguien del Madrid. A continuación escribo fragmentos de la rueda de prensa de Mourinho de ayer:


- "Es un gran equipo que ahora es campeón del mundo de clubes. Les felicito por ese título, aunque pienso que es más importante la 'Champions' que estos dos partidillos. Pero de verdad, de verdad, enhorabuena y muchas felicidades, porque son los nuevos campeones del mundo."


- "Son muy buenos. Si consigues ganarles algún título, haber hecho más puntos en 2011, a pesar de que no cuenta para nada, tiene mérito." 


Esas son las frases que dijo referidas al Barcelona. Si alguien es capaz de explicarme en que momento les falta al respeto, resta importancia o minusvalora se lo agradecería. En todo caso minusvalora la competición del Mundial de Clubes, y nadie discutirá que lo realmente importante no es ganar el Mundialito, es ganar la Champions. Y como nos pongamos a recordar cómo consiguieron llegar a la final de esa competición, tenemos un rato para hablar.


Independientemente de eso, en la rueda de prensa de ayer, Mourinho FELICITA Y ALABA al Barcelona en más de una ocasión. Cuando dijo que el Madrid ganaría cualquier otra liga, está diciendo que si no ganó esta el año pasado fue por culpa del Barcelona. Me parece un halago. No interesa hacerse eco de ello, no interesa dejar a Mourinho como alguien que valora los méritos de su rival. Lo que vende es decir que les falta al respeto porque ha dicho que los dos partidos del Mundialito fueron "partidillos". Y además, todo culé y antimadridista piensa igual, quiere obviar las buenas palabras de Mourinho hacia su rival y prefiere atacar, como siempre. Prefiere quedarse con una palabra antes que con todas las que he puesto en negrita ahí arriba.


Si hay que buscar un ejemplo en prensa, sólo había que darse hoy una vuelta por los periódicos deportivos. Si hay que buscar un ejemplo de culé que escucha y entiende lo que quiere, y luego dice algo que sabe que va a ser ovacionado por todos, ya que es atacar al demonizado Mourinho; tampoco hay que irse muy lejos. Alves contesta que "la envidia es mala", y me parece que para encontrar envidia en las palabras de Mourinho hay que proponérselo. También dice que "siempre trata de minusvalorar lo que ganan los demás". En serio, no sé si vio la rueda de prensa pero me parece que no. Y además de alguna otra perla, suelta esto y se queda tan ancho: "Ahora mismo somos los mejores, los números están ahí. Duela a quien duela, los mejores somos nosotros." Una vez más, demostrando la humildad de su equipo, y de paso también la suya. Las declaraciones de Alves me parecen patéticas, la interpretación de todo este asunto por parte de la prensa, lamentable. Algo a lo que por otra parte, deberíamos irnos acostumbrando.

lunes, 12 de diciembre de 2011

Saber ganar

Apuesto a que la mayoría de la gente ha escuchado cien mil veces más la frase "no sabes perder" que la frase "no sabes ganar". Pues señores, hay veces que tan difícil es una cosa como la otra. Hay que saber comportarse en la derrota, pero también hay que saber comportarse en la victoria, y llevo mucho tiempo diciendo que el Barcelona (no como afición, que muchos también, sino como institución) no sabe hacer esto último. El ejemplo más claro lo vimos hace poco más de un año, con las manitas al aire de los jugadores del Barcelona al lograr el quinto gol ante el Madrid, sin haber finalizado el partido. Pero no me tengo que ir tan lejos para demostrarlo, sólo copiaré y pegaré algunas declaraciones del sábado, después del partido. Muestras de humildad, de respeto y de saber ganar donde las haya.


Guardiola: "Esperaba que nos hubiera costado más sacar la pelota." 

Esa sutil forma de decir: "Mourinho macho, esperaba más de ti, me lo has puesto muy fácil".


Piqué: "Hemos dominado desde el primer minuto hasta el último. En todo momento hemos tenido el partido en nuestras manos." 

Un poco exagerado, ¿no? 


Xavi: "Hemos sido muy superiores al Madrid".

Leyendo a este y al anterior parece que ganaron 0-8. Pero claro, es que este hombre inventó el fútbol hace algo más de 3 años, es una eminencia.


Rosell: "Nuestros jugadores han dado un baño".

Este directamente no aprende, es el comentario más sangrante, y viene de la persona más representativa de todas. Pero este es el equipo humilde, ejemplo para los niños, que maravilla a todo el mundo. Y ojo, los abducidos somos nosotros.


Por suerte o por desgracia, todos somos presos de nuestras palabras. Decir estas cosas es escupir hacia arriba, y ya se sabe que la ley de la gravedad es implacable, no me cabe duda de que todo les caerá encima un día. Entonces leeré esta entrada y disfrutaré como un niño.

domingo, 11 de diciembre de 2011

Levantarse


Dije antes del partido que la sensación que una posible derrota dejaría en el madridismo sería impotencia, y así es. Sé que el partido dura 90 minutos, pero a diferencia del resto de los mortales, me voy a centrar en lo que ocurrió hasta el 65, cuando el Barcelona marcaba el tercero. De ahí al final sólo se vio a un Barcelona matando el partido y a un Madrid sin fe, descolocado y que pudo llevarse alguno más, hay que reconocerlo. Evidentemente, si la gente se va a quedar con esos 25 minutos el resumen es claro, nos pasaron por encima. Pero eso no sería justo. En los partidos suele ganar el mejor, y a los puntos el mejor ayer pudo ser el  Barcelona. Eso sí, no fue una superioridad amplia, no fue un baño, no fueron mucho mejores. Fueron mejores en los detalles, supieron llevar el partido a su terreno, estuvieron más acertados de cara al gol y su planteamiento del partido funcionó.


A parte del gol, el principio del partido fue el esperado, un Madrid que presionaba e intentaba robar arriba para pillar descolocada a la defensa culé. Eso duró 15 minutos, hasta que el Barcelona, tras reponerse del mazazo, se encontró con lo que buscaba, superioridad en el centro del campo para hacer su fútbol. Pese a ese dominio, al Barcelona le costaba crear ocasiones, la más clara llegó porque Ramos se escurrió, y a parte del gol no generó  peligro en la primera parte. Bien es cierto que el Madrid tampoco tuvo demasiadas. Eso sí, Cristiano tuvo en sus botas el 2-0 en una ocasión que no suele perdonar. Después del empate, esperaba un bajón por parte del Madrid que no llegó, no se descompuso y no hubo avalancha culé antes del descanso. De hecho, en ese cuarto de hora el equipo apretó bastante, para mí siendo superior a su rival, pero faltó precisión para llegar al área contraria.




 Me hace mucha gracia escuchar que el Madrid tendría que haber intentado que ellos no tuviesen el balón en el centro del campo. El Barcelona juega con Busquets, Xavi, Iniesta y Fábregas en el medio, y Messi y Alexis también bajan a recibir. Evidentemente, si tienen superioridad numérica en esa zona, tendrán más el balón, sería imposible que no lo tuviesen. El Madrid no puede pretender quitarle el dominio en el centro del campo al Barcelona teniendo inferioridad numérica ahí (inferioridad que con un trivote también habría tenido, por cierto), y no lo buscó. No me parece mal, cada equipo tiene sus medios y hoy por hoy esa no es la forma en la que se le puede ganar al Barcelona. Pese a eso, la magnificada posesión acabó bastante igualada al llegar al descanso.


Después del descanso, el Madrid volvía a lo que imponía la lógica, presionar lo más posible e intentar salir rápido, pero a los 10 minutos hubo un par de errores en las marcas, generadas por la posición más adelantada de Alves, que hizo que tocasen con más libertad y merodeasen con peligro el área en un par de ocasiones. En una de ellas el balón sale rebotado (Coentrao corta un pase a un jugador que estaba en fuera de juego, nadie ha dicho nada pero debió anularse la jugada) y la historia ya nos la sabemos, Xavi empalma, el balón da en Marcelo y se cuela llorando pegado al poste, por el único sitio al que no puede llegar Casillas. El partido se rompe, pero no se acaba. Fue un golpe difícil de encajar, no sólo por el gol, sino por la forma de encajarlo. El fútbol es un deporte y los deportes son mente también, y en estas situaciones se nota. Pese a ello, el Madrid tuvo un par de acercamientos en los siguientes 10 minutos que pudieron volver a cambiar el partido. La salida de Kaka’ fue positiva para el equipo y parecía que se podía empatar. Lo tuvo Cristiano en su cabeza, pero incomprensiblemente el balón se marchó fuera. Prácticamente después, con el Madrid volcado, Fábregas culminó una contra y fin del partido.


No voy a dudar en decir que al Madrid le faltan cosas, sobre todo madurez y confianza. Perder el miedo. La madurez sólo se consigue con tiempo, es un equipo joven y hay que dárselo. La confianza sólo se puede ganar de una forma: dando un puñetazo sobre la mesa en un partido como el de ayer, pero habrá más ocasiones, está claro.


Dije que esta vez no quería hablar del árbitro, pero me siento obligado a dedicarle el párrafo que sé que otros no le van a dedicar. El Barcelona tiene suerte y “suerte”. Soy de la opinión de que cuando a un jugador le expulsan por doble amarilla, ninguna de las dos deben ser por protestar, me parecen expulsiones muy baratas (como las que suele sufrir nuestro equipo, por cierto) y por eso pienso que los árbitros deberían pensarse más sacar ese tipo de tarjetas. Es decir, me habría parecido barata una expulsión a Messi. Dicho esto, si has establecido un criterio en el partido, no puedes cambiarlo después. Si le sacas amarilla a Xabi Alonso por una entrada casi igual a la que él recibe pocos minutos más tarde por parte de Messi, las dos las debes castigar de igual forma. Y a Xabi le enseñó la amarilla y a Messi, por ser la segunda, no. Eso no puede ser. Ya he dicho que el segundo gol del Barcelona no debió subir al marcador, porque Coentrao despeja un pase que va dirigido hacia un jugador que está bastante adelantado. Difícil de ver, sí, pero también hay que añadirlo al cupo de errores, y a mi entender es una jugada bastante decisiva.





A Alexis le perdonaron una amarilla por un control con el brazo, luego le sacaron otra. A Piqué (y me da igual que fuese en el minuto 93), le perdonaron la expulsión (segunda amarilla) por una falta a Cristiano Ronaldo cuando se colaba en el área. Y para terminar, el Barcelona tiene la “suerte” de que Alves (qué cosas, que caprichoso es el fútbol, mismo escenario, misma persona…) puede hacer una entrada con la plancha, TOCAR al jugador rival y no se pite ni falta. Creo que no hace falta recordar la causa de mi indignación.


Fin del capítulo arbitral, voy con la afición. Estamos jodidos, es la palabra que mejor lo define y es normal, pero este es el momento en el que se demuestra quién está en el carro y quién no. Los pseudomadridistas que se bajen, pero que cuando las cosas vayan bien no pidan hueco. Odio el ventajismo. Cristiano Ronaldo ha tenido el partido en sus botas y en su cabeza, sí. Se puede decir bien alto que falló. Pero no se puede silbar e insultar a un tío que desde que llegó va prácticamente a gol por partido. Que ayer no estuvo bien, vale. Que en los partidos contra el Barcelona no suele brillar, vale. Pero si vuelve a meter un gol decisivo como el de la final de la Copa del Rey luego que no venga ninguno de los que hoy le ponen a parir a decir que es el mejor del mundo. Eso no.


¿Golpe moral? Sería lo normal, habrá que ver la reacción del equipo en los próximos partidos. Ahí se verá como ha afectado esta derrota moralmente a los jugadores y para eso está el entrenador, el mejor entrenador del mundo (no me voy a cansar de decirlo), para que no se vengan abajo y levanten la cabeza. Porque como siempre digo:


NO ES MÁS GRANDE EL QUE MENOS VECES CAE, SINO EL QUE MÁS VECES SE LEVANTA


jueves, 8 de diciembre de 2011

Primer asalto

No es un partido cualquiera. Ayer se jugó posiblemente el partido más intrascendente de la temporada, y en apenas 48 horas se juega uno que puede marcar el futuro del equipo. Y sólo hablo de moral, pero es que el fútbol, como todos los deportes, no es sólo físico, es mental. Ganar daría una confianza y fortaleza mental al equipo que vale más que los 3 puntos en juego. Perder crearía cierta impotencia en los jugadores y en gran parte de los aficionados.





En estos dos días que quedan para preparar el partido, Mourinho no tiene que motivar a los jugadores, en estos partidos no es necesario. Su reto es hacerles creer en la victoria, que se crean capaces de ganar al Barcelona, contra el que han caído demasiadas veces en los últimos años. Ha habido una evolución, da la sensación de que su proyecto ya llegó a la cima y ahora está cayendo, y de que es nuestra hora. Que nuestro momento se acerca. Y es hora de demostrarlo.





La táctica rival en la batalla mental previa al partido es la que hemos visto otras veces. Quieren que el Madrid se confíe. Dicen estar a 6 puntos cuando están a 3, porque ellos han ganado su partido de la jornada 17 y el Madrid aún lo tiene que jugar. Quieren euforia madridista, y eso es lo que hay que rebajar. Las 15 victorias consecutivas y los récords en Champions y Liga son buenos, a todo el mundo le gusta batirlos y demuestra que este equipo va a quedar para la historia, pero no conviene inflarse, ni pensar que el partido del sábado va a ser fácil. Hay que saber marcar bien la diferencia entre confiar y confiarse, y estoy convencido de que Mourinho lo sabrá hacer, sabrá hacer al equipo confiar sin confiarse, por algo es el mejor entrenador del mundo. 




Este equipo ha generado en los aficionados la ilusión que se veía venir desde la pretemporada. Ilusión y confianza en un proyecto que parece más sólido que el año anterior, pero que también tendrá sus momentos difíciles.El Madrid es un equipo grande, pero que a nadie se le olvide que viene de atrás, que está cogiendo impulso para volver a situarse en la cresta de la ola. Este partido es una oportunidad para dar un puñetazo encima de la mesa. En la Supercopa el equipo estuvo más cerca que nunca, por más que la prensa protectora culé haya querido disfrazarlo durante meses. Es una oportunidad para comenzar a cerrar bocas, para que no tengan mantas suficientes para tapar lo poderoso que está haciendo Mourinho a este equipo. 




Espero no tener que hablar del árbitro el domingo, de verdad, porque no hay nada que me enfade más que tener la sensación de que si el árbitro no se hubiese equivocado en contra de mi equipo se habría logrado un resultado mejor. Y esa sensación, por desgracia, la he tenido en más de una ocasión en los últimos enfrentamientos contra el Barcelona. (He sido muy diplomático en estas dos últimas frases, quizás demasiado) De momento, no quiero pasar por alto la primera situación que me molesta, y que nadie se ha ocupado de resaltar en prensa ni en ningún sitio. Este partido se juega en sábado, así lo deciden las televisiones y hay que acatarlo...o no. El Barcelona el año pasado no lo acató y consiguió que el primer clásico se jugase un lunes, porque esa semana el Madrid jugaba el martes en Champions y ellos el miércoles, por lo que habrían tenido un día menos de preparación. Y aquí viene el primer "¿por qué?" del año, y espero que sea el último (el tema de provocar tarjetas tiene todas las papeletas para ser el segundo, en el momento en que sancionen al Madrid...): ¿Por qué el año pasado se puso el partido el lunes y este año, en el que la situación es a la inversa, se juega en sábado?






En resumen, espero que los madridistas disfrutemos del partido, sin polémicas y que el Madrid gane. Para poco a poco volver a aquellos tiempos en los que ellos corrían detrás de nosotros, sin alcanzarnos por más que intentasen tirar de nuestra camiseta. ¡HALA MADRID!



lunes, 21 de noviembre de 2011

Que no os engañen.







Como madridista me considero en la obligación de difundir esta imagen que he visto en Twitter. Sí, en Twitter, en ningún medio de comunicación ni en ningún periódico deportivo. Ni en As, ni en Marca, para tener que escuchar luego que dan asco porque son del Madrid. Dan asco, estoy de acuerdo, pero por otras cosas. 


Lo fácil es sacar 30 veces una imagen de la jugada del sábado en la que se ve de lado y evidentemente, dado el movimiento que hace Higuaín para apoyarse en el suelo, parece que le da en el brazo (nunca en la mano, pero clases de anatomía no voy a dar a los culés, lo que faltaba). En la toma vista desde atrás parece que le da en el pecho, pero ahí no interesa "lo que parece". 


¿Qué toma lo dejaría todo claro? Claro, una en la que se vea de frente. ¿Dónde está esa toma? Pues eso, en Twitter. No tengo nada más que decir. Bueno sí, que si Higuaín tiene la mano en las costillas, tenemos un problema, dudo que pueda volver a jugar al fútbol con una malformación así. Y nada, que miren la imagen un millón de veces hasta que vean la mano, apuesto a que con paciencia lo consiguen. Si ellos lo quieren ver que lo vean, lo que no soporto es que hagan creer sus mentiras a cualquier madridista que no tenga la suerte de encontrarse con la verdad por casualidad.

sábado, 19 de noviembre de 2011

Encuentra las 7 diferencias



FOTO 1


1- Los equipos que se enfrentan en la foto 1 son Real Madrid y Barcelona (el "malo" que gasta muchos millones y el "bueno" cuyos integrantes no han roto un plato en su vida) y en la foto 2 Portugal y Bosnia.

2- En la foto 1, Pepe es el que realiza la entrada, en la foto 2 Pepe la recibe. En este punto hay que aclarar que Pepe es un jugador muy agresivo, maligno y que siempre merece ser sancionado y que además está entrenado por un entrenador temible y malvado que está destruyendo el fútbol español.

FOTO 2

3- Consecuencias: Tras la acción de la foto 1, Pepe ve la tarjeta roja. En la foto 2 el jugador bosnio no recibe amonestación (ni siquiera amarilla), pero la falta se pita, con lo cuál el árbitro (el mismo en las dos fotos, que a nadie se le olvide ese pequeño detalle) la vio.


4- En la foto 2 a Pepe claramente le tocan. En la acción de la foto 1, a Alves no.


5- Tanto en la foto 1 como en la foto 2, los infractores van a por el balón, pero está mucho más cerca de disputarse en la foto 1. De hecho, en la acción de la foto 1, Pepe TOCA el balón, sólo hay que ver la dirección que éste tiene después de la entrada. En la foto 2 esto no sucede.


6- Alves, tras la acción de la foto 1 dio un grito descomunal e hizo gala de las dotes teatrales a las que nos tiene acostumbrados, y tuvo que salir la camilla. En la otra, Pepe protesta en el suelo MENOS pero con razón, le acaban de dar una patada, y la camilla no es necesaria.
 

7- Pepe tiene mala fama desde aquella desafortunada acción en la que se le fue la cabeza y empezó a patear a Casquero en el suelo. Esa fama nunca se la va a quitar de encima, y la prensa se encarga de que vaya en aumento, destacando cada cosa que hace Pepe mucho más que si la hiciese cualquier otro jugador de cualquier otro equipo. Lulic, jugador bosnio autor de la segunda entrada, no tiene fama de asesino, y por lo tanto, como es buen chaval, no hay que pensar mal de él. Quién crea que a un árbitro no le afecta a la hora de tomar una decisión la buena o mala fama de un jugador, no ha visto mucho fútbol.


domingo, 13 de noviembre de 2011

Dependencias

Messi es el Barcelona, el equipo juega para él y es protagonista en la mayoría de las victorias de su equipo y eso nadie lo puede negar. El entrenador le deja libertad para hacer lo que le da la gana y éste lo aprovecha. Pero yo no estoy aquí para explicar los problemas caseros del Tarzán de los bonsáis, a lo que voy es a la siempre negada “Messidependencia”. Se ha hablado más de “Cristianodependencia” que de lo mucho que depende el Barcelona de Messi. Es cierto que éste falta poco, no se lesiona casi nunca pese a los esfuerzos explosivos que hace en cada carrera. No insinúo que se dope porque no tengo pruebas para hacerlo, pero es extraño que un jugador que al principio de su carrera se lesionaba a menudo lleve meses y meses sin sufrir ni una sola lesión pese a disputar casi todos los partidos de todas  las temporadas, un Mundial y una Copa América, y no andando precisamente.
Durante las poco más de dos temporadas que lleva Cristiano Ronaldo en el Madrid ha tenido algunas lesiones a las que el equipo se ha sobrepuesto con solvencia, en muchas ocasiones incluso jugando mejor que cuando él estaba. Evidentemente se le echa de menos porque es un jugador determinante, pero en cuanto a resultados el equipo apenas se ha resentido sin él. Y veo personalmente más dependiente al Barcelona de Messi que al Madrid de Cristiano. El ataque del Barcelona es él, no tiene ni siquiera un 9 puro, porque Villa cae a banda constantemente y Pedro es un jugador de banda (a Alexis no se le ha visto lo suficiente como para hacerse una idea de cómo va a jugar. De hecho Messi mete más goles que Villa (que todavía vive del gol que le metió al Madrid en la Supercopa)  y más que nadie. Algunos me dirán que Cristiano también es el que más goles mete en el Madrid. Sí, pero cuando él no está son otros los que lo meten, y cuando está también. Higuaín se hinchó a meter goles hace dos temporadas y ahora, una vez recuperado vuelve a meterlos, y además  ahora está Benzema, que se ha convertido, perdón, al que Mourinho ha convertido en un delantero espectacular. Quiero decir con esto que el Madrid sí que tiene delanteros que metan los goles y aún le quedan otras opciones para las bandas. El gol no depende tanto de Cristiano en el Madrid como de Messi en el Barcelona. Y el juego del Madrid no depende tanto de Cristiano como depende el juego del Barcelona de Messi. Y eso es así.
Si dices que el Barcelona depende de Messi hoy en día te dirán que no (¡sacrilegio!), porque es que en Barcelona están Xavi e Iniesta, claro. Pero por  mucho que estén Xavi e Iniesta para hacer rondos con Abidal, Piqué y Valdés, sin goles no se gana.  Estoy seguro que un Madrid sin Cristiano es mucho más equipo que un Barcelona sin Messi, pero dudo que podamos comprobarlo algún día, porque ese chiquitín es de hierro. ¿O es que los árbitros le protegen más que a Cristiano? Mierda, ya estoy diciendo tonterías otra vez, qué cosas tengo…

martes, 25 de octubre de 2011

Farsa de oro

Está claro quién va a ganar el Balón de Oro este año, tendría que ocurrir algo extrañísimo para que no lo ganase Messi. Si el año pasado lo ganó cuando quizás menos lo merecía, este año lo ganará seguro. En Wikipedia se puede leer lo siguiente: "Los criterios para adjudicar el premio venían descritos en el artículo 9 del reglamento del trofeo. Estos son: los resultados obtenidos individual y colectivamente durante el año en consideración, la clase del jugador (talento + juego limpio), su carrera profesional y la personalidad y carisma que posee." Joder, no sabía yo que la personalidad y el carisma fuesen fundamentales para que un jugador de fútbol sea considerado mejor jugador del mundo. Leído esto, ya puede meter Cristiano Ronaldo 100 goles en una temporada que no se lo va a volver a llevar. Este año está nominado Abidal por haber superado una cáncer y a Puyol después de haberse tirado lesionado casi toda la temporada. Y todos sabemos por qué, porque caen bien y son del equipo de moda y punto. El año pasado Diego Milito, que metió dos goles en la final de la Champions para darle el título a su equipo e hizo una magnífica temporada ni siquiera fue incluido en la lista de 50 finalistas. ¿Hizo más Villa la temporada esta temporada para conseguir estar nominado? ¿Hizo más que Falcao (otro que tampoco está este año)? Y podría seguir hasta mañana con injusticias de todos los colores.

Y es que este es un trofeo que siempre me pareció de lo más injusto. No responde a datos objetivos como cifras goleadoras, asistencias o la imbatibilidad de los porteros y de hecho antes los que votaban eran exclusivamente periodistas. Sí, periodistas, de esos que demuestran su imparcialidad y profesionalidad cada vez que sueltan media palabra. Ahora votan los capitanes de selección, seleccionadores y periodistas y corresponsales de la revista France Football (?) según tengo entendido. ¿Es esto suficientemente objetivo como para ser el premio individual más importante del mundo del fútbol? Parece que sí. A una persona le puede gustar mucho un jugador, pero eso no quiere decir que haya hecho una buena temporada y se merezca un trofeo como este. Para mí, de hecho, al entregarse todos los años el ÚNICO criterio debería ser lo acontecido en la temporada que acabó, y además...¿por qué en enero? Si la temporada se acaba en mayo o en junio, el trofeo se da en mayo o en junio y punto. Así se evitaría la famosa frase "a veces tienen mucho peso el Mundial y la Eurocopa, pero otras no". Pero vamos a ver, si en ambas hay un trofeo al mejor jugador (y de hecho en el Mundial creo que también se llama Balón de Oro) para qué hay que mezclar unas cosas con otras. ¿Acaso en la Bota de Oro se contabilizan los goles de las competiciones internacionales? 

Con estos criterios que le faltan el respeto al sentido y la razón por todas partes, no es de extrañar que jugadores como Raúl, Roberto Carlos, Totti, Del Piero, Maldini, Henry,  Van Nistelrooy, Bergkamp, Eto'o, Puskas, Koeman, Butragueño, Giggs y alguno más que me dejo no lo hayan ganado nunca. Este debería ser argumento suficiente para descalificar por completo un trofeo que cada vez cobra menos sentido y en el que a veces es más importante tener un importante respaldo mediático y caer bien que hacer una buena temporada para ganarlo.

lunes, 19 de septiembre de 2011

Una piña

Después de lo acontecido ayer, me siento en la obligación de escribir una entrada, no he tenido tiempo antes pero ahí va. No quiero caer en lo obvio ni repetir lo que ya se ha dicho, por eso del árbitro ni voy a hablar. Sólo diré una cosa y con eso lo digo todo: Turienzo (según su acta) interpretó que Ballesteros "intentaba levantar" a Di María cuando Khedira le empujó. Si este personaje cree que darle voces a un tío que está en el suelo le puede ayudar de alguna forma a levantarse dejémosle, puede que sea una de las pocas personas que crea en los milagros.

Dicho esto, pese al injusto arbitraje no es eso de lo que quiero hablar ahora. Prefiero hablar de la diferencia entre la crítica constructiva hacia nuestro equipo y el desprecio y la contradicción. Me explico. Nosotros, los madridistas, no podemos ponérselo tan fácil al antimadridismo reinante en este país, no podemos allanarles el camino, no podemos caer en la manipulación ni el ventajismo que ellos promueven. Todo el mundo se equivoca, en el partido de ayer pasaron muchas cosas y hubo errores, por supuesto que los hubo. Para que un equipo que, con todos los respetos, es superior a su rival pierda el partido hacen falta errores o una suerte descomunal por parte del pequeño. Ningún jugador rindió a un nivel excepcional, Benzema falló una ocasión clara (todos los delanteros fallan alguna), Mourinho quizá se equivocó al sustituirle, faltó agilidad, los jugadores que salieron del banquillo no fueron el revulsivo esperado, hubo mucha torpeza por parte de la mayoría de jugadores ante las provocaciones del rival... Y seguro que me dejo algo. Y sí, todo eso es verdad, y no puedo estar en desacuerdo con quien lo diga. Lo que no acepto es oír lo que he oído de boca de MADRIDISTAS (no voy poner comillas, no dudo de que lo sean) que hasta hace dos días alababan y endiosaban a Benzema, a Coentrao, y sobre todo a Mourinho. Los delanteros fallan ocasiones, TODOS y cada uno de ellos, y no creo que en los últimos tiempos debamos tener quejas de Benzema. Aunque claro, si se junta que ayer Benzema falla una clara y Agüero mete dos goles ya está, todos a poner el grito en el cielo. Eso es ventajismo, y hace mucho daño a un equipo, pero más a una afición. Mourinho pudo equivocarse en la alineación, o en los cambios, pero si una de las ocasiones de la primera media hora hubiese sido gol, todos los que ayer vomitaban cosas en su contra hoy estarían aún diciendo lo bueno que es, que hizo las rotaciones correctas y necesarias y además se ganó. Eso es lo que no puede ser. El equipo está por encima de todas esas cosas, de opiniones, de jugadores, de entrenadores y demás, y lo mejor para el equipo ahora es la unión con su afición, es esa complicidad que se vió en la ida de la Supercopa en el Bernabéu. Es el apoyo de una afición cuando una afición más tiene que apoyar, en los momentos malos.

No creo que UNA derrota deba hacer cambiar tanto el estado de ánimo de algunos madridistas, ni su forma de pensar, ni sobre todo, de apoyar al equipo. Al mínimo traspiés no te puedes bajar del carro y decir cosas como que "Khedira no es jugador para el Madrid" simplemente porque cometió un error y fue expulsado (y el error lo comparte con el árbitro, por cierto). Tengo que admitir que Khedira a mí al principio tampoco me gustaba, acababan los partidos y me preguntaba si había hecho algo. Fue cuando faltó cuando se notó lo importante que es para el equipo, en las semifinales de Champions del año pasado. Ayer, sin ir más lejos, el Madrid cambió por completo al perder esa pieza en el centro del campo, se descompensó por completo. Khedira no es vistoso, pero es importante, equilibra al equipo. Además, supongo que el que todavía ostenta el título como mejor entrenador del mundo y el seleccionador alemán algo sabrán de fútbol. Ellos lo consideran imprescindible. Me parece bien que se critiquen las cruzadas de cables de Pepe, que alguna vez pueden costar una expulsión al equipo y que se lo debería hacer mirar, pero me estomaga ver madridistas subidos a la corriente de "Pepe asesino", influenciados evidentemente por esa campaña que hay en su contra. Todo lo que hace está vigilado al extremo. Defensas duros ha habido muchos, en todos los equipos, y no he visto nunca cosa igual. Bastante es que todo el mundo, árbitros incluidos, le hayan puesto la cruz como para que se la pongamos nosotros. Tiene cosas que mejorar y puede que nunca las mejore, pero como central es de lo mejor del mundo y eso es lo que más debe importar. Si no fuese bueno no querrían hundirlo nuestros rivales.

En resumen, creo que debemos apoyar el equipo, que la ilusión que había generado esta nueva temporada no debe resquebrajarse al más mínimo tropiezo. Hay equipo, hay entrenador y se puede hacer algo grande. El madridismo tiene que ser una piña.





domingo, 11 de septiembre de 2011

Odiosas contradicciones...


Ayer, el Real Madrid ganó un partido difícil, con trampa, porque los partidos al volver de los partidos de selecciones siempre son complicados y al Madrid siempre se le han atragantado. Fue un partido raro, el equipo muy partido y no se defendió bien. No jugó bien, vamos. Yo también soy de la opinión de que se habría acabado ganando, con o sin ese penalti que hoy ha dado la vuelta al mundo. Un penalti fuera del área, sí, que no lo fue. Fue falta y ya está (que digan algunos que ni siquiera fue falta ya es demasiado, pero bueno, así funciona esto hoy en día), pero tampoco estaba a un metro del área, es comprensible que el árbitro (malísimo por cierto, yo creo que es de los peores de la Liga) lo viese dentro. Lo que me irrita es que cuando hay errores arbitrales que favorecen al Madrid se genera un bullicio y una indignación descomunales, y cuando es a favor del Barcelona (que en los últimos años es MUCHÍSIMO más a menudo) existe una especie de ley del silencio para ocultarlo, no darle propaganda. Y además, los equipos se indignan mucho más cuando el error es cuando juegan contra el Madrid que contra el Barcelona. A ver cómo se pone el entrenador del Getafe cuando juegue contra el Barcelona y le líen alguna, o a ver qué dice después Rubén Pérez en Twitter, espero ansioso. Fuera de todo esto, que al fin y al cabo da igual porque lo importante es el resultado, hubo una jugada en el partido del Barcelona ante la Real Sociedad que, por lo visto, tiene muchas interpretaciones.


Yo siempre creí que en los penaltis no existía la ley de la ventaja, pero no me sé el reglamento y, sinceramente, no me apetece leérmelo. No debe estar muy claro el tema porque lo supuestos “expertos” no se ponen de acuerdo en si el árbitro tomó la decisión correcta o no. Yo, ni soy árbitro ni quiero serlo, pero tengo la suerte de tener una gran memoria, y ayer cuando se dio esa situación se me vino a la cabeza la final de la Champions de 2006 que ganó el Barcelona ante el Arsenal, en la que pasó ésto (no hay vídeos en Youtube de esa jugada así que he tenido que poner un resumen, es por el segundo 50, pero vamos que todos recordamos como fue):

                             




El árbitro del partido dijo esto después:




Noticias de Sport y Mundo Deportivo del día después de la final no he encontrado en Internet, me ha resultado imposible. Es cierto que muchos pidieron que el gol de Giuly subiese al marcador, pero, a mi modo de ver,  el Arsenal hubiese preferido un gol en contra que jugar con 10 toda la final. Y al Barcelona ayer le vino mejor que no expulsasen a Busquets ni se pitase penalti.

Creo que en las dos ocasiones salió beneficiado el Barcelona. En estas situaciones quedar con un hombre menos condiciona mucho. Nadie me puede negar que las jugadas se parecen, se diferencian en que una suponía penalti y la otra no y en que una es mano y la otra es falta del último hombre, pero ambas suponen la expulsión. Y todos esos culés que hoy decían que la jugada de ayer está bien pitada (como no, por supuesto), ¿reconocerán entonces que en aquella final el árbitro les hizo un gran favor expulsando a Lehmann y obligando al Arsenal a jugar con uno menos casi todo el partido?

Ah, y por último, muy llamativa la forma de pasar de puntillas sobre la jugada polémica del partido por parte de ese periódico objetivo y poco radical llamado Sport.




¿Alguien cree que si estuviese tan claro que el árbitro acertó no se habrían detenido expresamente en reseñar ese acierto?




viernes, 9 de septiembre de 2011

Villa y Benzema

 Villa nunca me cayó bien, partiendo de ese afán por desbancar en intentar borrar al Raúl del mapa, intentando imitar sus méritos, sus gestos (véase el 5-0 del año pasado, cuando se señaló el dorsal como hacía Raúl), lanzándose a por el 7 de la selección en cuanto el que era capitán faltó. Le ayudó la prensa llamándole “el 7 de España”, calificativo que siempre tuvo Raúl, y la afición hizo más sangre con lo de “illa illa illa, Villa maravilla”, cántico que pertenece a otro 7 madridista, Juanito. Por estas cosas siempre pensé que le pegaba jugar en el Barcelona, y allí acabó. Evidentemente desde que está en el Barcelona me cae peor, y me alegré de que no lo fichase el Madrid en su momento, algo que muchos madridistas me han echado en cara (lo respeto, es un buen jugador pese a que no me caiga bien y no se puede decir que al Madrid le hubiese venido mal).

Pero centrándome únicamente en lo deportivo, ahora que Benzema empieza a funcionar (la paciencia en el mundo del fútbol es vital y da sus frutos) y Villa a decaer, el tiempo me va dando la razón poco a poco. Benzema es más joven, no era mejor que Villa cuando tuvieron que decidir entre uno y otro pero estoy convencido de que puede llegar a serlo, puede convertirse en el mejor delantero del mundo perfectamente, y si no, al tiempo. Villa, sin embargo, el año pasado pasó prácticamente desapercibido, y no tuvo ningún problema de adaptación porque jugaba ya con la mitad de sus compañeros en la selección y no tuvo que cambiar de país. De hecho, pese a todas las críticas que recibió Benzema, a lo largo de la temporada tuvo un mejor promedio goleador que Villa (y eso es estadística, no hay ni trampa ni cartón), dato del que pocos medios se han hecho eco, por cierto. Pero Villa parece tener esa protección especial por parte de la prensa por jugar en el Barcelona y ser campeón del mundo y de Europa con la selección. No pasa nada si no rinde, no pasa nada si insulta a la religión de un rival en un partido(ejemplo para los niños, ¿a que sí Pep?) o le expulsan por dar un golpe a un contrario. Además, como metió un golazo en el Bernabéu en la Supercopa (que golpeó en Sergio Ramos y que si no hubiese sido con “el balón de playa” que tanto criticaba Guardiola no habría hecho ese efecto), ya tiene para vivir de ese gol durante 1 ó 2 meses. Sinceramente, ser el delantero de un equipo como el Barcelona, siendo supuestamente el mejor delantero español, y no conseguir ni siquiera el trofeo Zarra al máximo goleador español de la Liga me parece un fracaso. Y ya pueden decir lo que quieran desde Barcelona sobre su rendimiento. Este jugador está ya de vuelta, de hecho intuyo que no tardará demasiado en perder la titularidad en su equipo y si su rival en la absoluta no fuese Torres también la perdería (Del Bosque no se atreverá a quitarle). Benzema sin embargo está empezando a despegar, y creo que pronto nos parecerá poco lo que se pagó por él que, por cierto, fue menos de lo que pagó el Barcelona por Villa, ahí lo dejo.

sábado, 20 de agosto de 2011

Mentiras 2.0

Ya hace tiempo que vengo quejándome de la hipocresía que rodea al mundo del fútbol y el doble rasero que se utiliza para medir las acciones de Real Madrid y Barcelona, pero es ahora, a pocos días de acabar la Supercopa de España cuando procede más hablar de ello, cuando tengo los ejemplos recientes y no se me olvidan las cosas.
En esta Supercopa se ha visto un equipo superior, el Real Madrid, y eso parece escocer mucho a algunos, pero es así. En la ida mereció ganar, y por más de un gol. El Barcelona aún no sabe cómo se encontró aquellos dos goles en el Bernabéu, pero el fútbol es así y en otras ocasiones ha sido el Madrid el que ha llegado dos veces y ha metido dos goles, no hay que darle más vueltas, la suerte aquel día no estuvo de nuestro lado y ya está. Tampoco lo estuvo en la vuelta, con ese balón al larguero y otras cuantas ocasiones que se escaparon por poco, y encajando un gol (otra vez) en el minuto 45 (por cierto, hay una repetición de ese gol, desde el ángulo contrario, en el que da la sensación de que Messi se ayuda del hombro al controlar y darle el balón a Piqué, pero no la he vuelto a ver casualmente, y no hay manera de que salga de dudas porque no la ponen). A parte de esto quedan las ”pequeñas cosas” en las que, ante cualquier duda, siempre se pita a favor del Barcelona. No tendría por qué ser raro teniendo en cuenta que siempre en la historia del fútbol la mayoría de los árbitros han sido “caseros”, favorables al equipo que juega en casa ante estas situaciones, pero es que en los últimos años parece que el Barcelona juega siempre en casa porque ese trato de favor lo tiene siempre. Aún así, en la vuelta de la Supercopa nos encontramos con uno de los mejores arbitrajes de los últimos clásicos, sin ningún error grave y controlando bastante bien hasta que los jugadores empezaron a ponérselo difícil con protestas y teatros. Con protestas los de ambos equipos, con teatros sólo los de uno. A Mascherano, Abidal, Busquets o Iniesta les cuesta muy poco caer al suelo, en cuanto tienen problemas para controlar el balón o se les echan encima buscan el contacto con el rival para dejarse caer y provocar la falta. En muchas de las faltas que reciben, el jugador contrario ni se mueve, y las de Iniesta son siempre iguales, pone la espalda, deja el pie un poquito atrás, enseña el balón y en cuanto el rival acerca el pie a la pelota y le roza a él cae al suelo a plomo, y falta.



Las típicas faltas que buscan los centrales de todos los equipos dejando el culo atrás para recibir el contacto y tirarse, en Barcelona las hacen casi todos en cualquier parte del campo. Durante toda la segunda parte del partido de vuelta, mejor dicho, hasta el minuto 82, cuando empató el Madrid, el Barcelona se dedicó a perder tiempo (a su manera, buscando el suelo), a encerrarse atrás buscando la contra (con cambio defensivo del Guardiola incluido, Adriano por Villa, para los puristas) y a dar pelotazos. Si ese es el juego del que tanto presumen, eso de “ir siempre a por otro gol”, “defender con el balón” o “no dejar de atacar”, debe ser que yo no me entero, debe ser que ellos ven algo distinto por el televisor a lo que veo yo. Cuando llega el minuto 70 o 75 de un encuentro y el Barcelona va ganando, su forma de dormir el partido no es otra que la de sobar la pelota en su propio campo y si les aprietan un poco irse al suelo. Lo vengo observando desde hace un par de temporadas y es así, no falla, y no sólo si van ganando por un gol, hay veces que incluso siendo más goles los que llevan de renta, actúan de la misma forma. Abidal, Piqué y Valdés son los jugadores que monopolizan el juego del Barcelona durante los últimos minutos de la mayoría de los partidos, y si no solamente hay que ponerse en el televisor y mirarlo. Si en una de esas largas posesiones consiguen que le llegue el balón a Messi y haga un roto y meta un gol… maravilloso, ya tienen el mejor ataque del planeta.

Estas cosas, evidentemente, no las ve nadie, ni siquiera todos los madridistas lo ven. Todo el que haga algo de caso a la prensa, ya sea por televisión o periódicos tendrá mucho más difícil hacerse una opinión objetiva, porque la información deportiva de este país es una continua reverencia al Barcelona, haga lo que haga, y un continuo martillo contra el Madrid, haga lo que haga. Son modas, todos se apuntan al caballo ganador, como siempre. Lo que ha cambiado con respecto a otras modas es que esta vez no se conforman con apuntarse al caballo ganador, sino que intentan cebarse con el que gana menos, hundirlo como sea, les divierte meterse con el Madrid y lograr que toda España se crea sus falacias y crezca el odio hacia nuestro equipo. Todas esas falacias que siempre salieron de la prensa catalana y todo el mundo asumía su cierta radicalidad y subjetividad, ahora son aceptadas, como si fuesen la verdad absoluta, difundidas por el resto de medios (en menor medida y sin insultos, pero difundidas al fin y al cabo), y aceptadas por la gente, que como borregos creen todo lo que les dicen. Todo lo malo que haga alguien del Barcelona será disimulado y se le restará importancia, lo malo que haga alguien del Madrid merecerá la máxima pena posible. Se habla de cantos racistas contra Alves en el Bernabéu, pero no se habla de cantos racistas contra Marcelo (que los hubo) en el Camp Nou, ni de Busquets llamando mono a Marcelo, ni de Villa insultando la religión de Özil para sacarle de quicio. No se habla porque ellos son ejemplares y modélicos.

Luego está el asunto de la prepotencia. ¿No es prepotencia decir que eres un ejemplo para los niños, que los jugadores de tu equipo son míticos y que cuando ellos pierden pierde el fútbol? A mí eso no me parece humildad precisamente, Xavi, por ejemplo no me parece humilde, cada declaración que hace tiene un doble filo y una intención de atacar al contrario y ensalzarse a sí mismo (cuando ha alcanzado su plenitud futbolística casi a los 30 años, después de haber sido criticado durante la mayoría de su carrera). Dos no se pelean si uno no quiere, eso me enseñaron a mí, pero en todas las trifulcas que tienen Madrid y Barcelona siempre, a la hora de buscar culpables los dedos apuntan a jugadores o técnicos madridistas, y según ellos “Mourinho se está cargando el fútbol español”. Estaban mucho mejor hace dos años cuando nadie les plantaba cara, ganaban a su antojo y nadie se atrevía a decir esas verdades que tanto les duelen. La diferencia entre antes y ahora es que antes el Madrid callaba y tragaba con todo y ahora no lo hace, ha entrado en el juego de no cerrar la boca, en el juego que han tenido ellos durante sus más de 100 años de historia, porque sí, ellos también han hablado, y mucho. Y además, los duelos deportivos entre los dos equipos han aumentado en calidad y pasión desde que está Mourinho, y dudo que eso sea malo para el fútbol español, que ahora tiene posiblemente a los dos mejores equipos del mundo en su Liga. También me parece algo osado lanzarse a insinuar y criticar (Xavi) que el Madrid ha orientado su pretemporada sólo a preparar la Supercopa y no la temporada en sí, cosa que no creo que sea así visto lo que dijo Mourinho, que no dio demasiada importancia al título antes de disputarse. Pero es que, aunque hubiese sido así, ¿qué derecho tiene ese a decir lo bien o mal que se ha preparado un rival para la temporada que empieza? Un tío que se cree que ha inventado el fútbol debe sentirse una eminencia en posición suficiente para decir si los demás hacen lo que deben o no. Quizá sea verdad que los segundos años de Mourinho son mejores y se haya empezado a ver ya con una superioridad física evidente y por eso estén con algo de canguelo. Y vuelvo a decir lo que vengo diciendo últimamente, cada uno empieza su pretemporada CUANDO LE DA LA GANA y sabiendo a las consecuencias que se tiene que atener tanto si lo hace antes como después, no debe servir como excusa una cosa que tú mismo eliges y me parece lamentable que haya sido utilizada por parte del Barcelona, desde los directivos hasta los jugadores, pasando por supuesto por el falso humilde.

Muy poca gente entiende a qué me refiero cuando hablo de Guardiola como “falso humilde” o “hipócrita”, tiene engañada a casi toda España, madridistas incluidos, con su labia y sonrisita. Me falla que normalmente no encuentro ejemplos directos que justifiquen lo que digo, que más que a ejemplos concretos se refiere a una actitud continua por parte del entrenador del Barcelona. Hoy si tengo algún ejemplo. Ya he dicho, no me quiero repetir, que el Madrid fue mejor en el partido de ida en el Bernabéu y mereció ganar. Después de ese partido, en rueda de prensa a Guardiola le costaba reconocer la superioridad del rival, achacándola continuamente a su mejor preparación física, a que ellos llegaban justitos, al balón de playa, a las ausencias… Y no admitiendo el injusto resultado, o haciéndolo a regañadientes. En la rueda de prensa posterior al partido de vuelta no tuvo problema en decir que si en el partido de ida hubiesen quedado 4-1, 4-2 o 5-2 no habría pasado nada, que habría sido lo normal por las ocasiones del rival. Mi pregunta es: ¿Por qué no lo dijo en su momento si tan claro lo tenía? Porque supongo que pensaba lo mismo el día del partido de ida también. A lo que voy es a que es muy fácil ser humilde y reconocer las cosas cuando ganas y cuando sabes que ya no tienes nada que perder. Es muy fácil reconocer los méritos del rival cuando todo te va bien y cuando estás en la cresta de la ola. Será más difícil cuando empiecen a perder. Tengo la intuición de que la intención de Guardiola es irse del Barcelona cuando las cosas se pongan feas o incluso antes, por lo que quizá no veamos los malos modos del modélico cuando llegue esa situación, ojalá llegue este año y no nos lo perdamos. Sin embargo, ya nos dejó algunas pinceladas en la única ocasión en los más de 3 años que lleva en el Barcelona en la que se ha visto ligeramente contra las cuerdas, tras la final de la Copa del Rey del año pasado. Ahí se vio al verdadero Guardiola, el que nunca se queja de árbitros, protestando por un acierto del linier en la final de Copa y viniéndose arriba en la siguiente rueda de prensa, poniéndose nervioso y llamando “el puto amo” con sorna a Mourinho, todo un ejemplo para los niños también. A eso me refiero cuando digo que es hipócrita, no deja ver lo que de verdad piensa porque le van las cosas bien, pero en cuanto le van un poco mal sale el verdadero Guardiola, el que se exaltó en un partido y chilló por un pinganillo al auxiliar para que le oyese el árbitro, y luego se atrevió a decir, con toda la tranquilidad del mundo que un árbitro mentía en su acta. El jugador más expulsado de la historia del Barcelona. Todos los que están metidos en el mundo del deporte tienen arranques así y son justificables a mi modo de ver, no me parecen reprochables del todo los arranques de Guardiola, lo que no apruebo es que los arranques de unos sean demonizados y los de otros sean obviados porque ahora “son los buenos” y hay que apoyarlos en todo e ignorar las cosas malas que hagan.




Cuando alguien pierde los estribos y hace alguna acción fuera de lugar (siempre y cuando éste sea del Madrid, por supuesto), nadie se para a buscar las causas que le han llevado a actuar así. Se ha hablado mucho de la tangana del final del partido de vuelta de la Supercopa, del dedo de Mourinho y demás, pero no he escuchado a nadie hablar del gesto de Messi con la mano mientras pasaba por el banquillo del Madrid después de anotar el tercer gol de su equipo, como invitándoles a hablar, lo que a mí me parece un gesto de provocación evidente. Pero como Messi es tan bueno, tiene cara de no haber roto un plato en la vida y meterse con él está prohibido pues nada, no pasa nada. A estas cosas me refiero cuando digo que es muy fácil decir que unos no saben perder, pero difícil admitir que hay otros que no saben ganar.



Ah y se me olvidaba, de siempre, cuando un jugador llega a última hora y no tiene la licencia federativa para jugar el siguiente partido, se queda sin jugarlo hasta que esa licencia llega. No recuerdo ningún caso concreto ahora mismo, pero sé que ha habido casos con otros equipos, nunca con el Barcelona. Porque el otro día a Fábregas le bastó con el DNI y un “permiso de la federación” para disputar el partido.

Me queda hablar de la campaña anti-Mourinho y de Mourinho en sí, de la supuesta violencia del Madrid y de Pepe y Marcelo, pero lo dejaré para otra entrada que esta ya se está alargando.


jueves, 18 de agosto de 2011

Impotencia es la palabra

Impotencia es la palabra. Cualquier persona a la que le guste el fútbol y haya visto estos dos partidos reconocería que el Madrid mereció ganar el otro día y empató, y que hoy no merecía perder y perdió. Cuando a un equipo, en este caso el Barcelona, le sale todo bien y tiene todo de cara llega un momento en que te planteas si realmente se puede hacer algo más. Hoy se ha visto a un Barcelona encerrado en su campo durante TODA la segunda parte, perdiendo tiempo, tirándose al suelo una y otra vez y dejando la iniciativa al Madrid. ¿Ese es el juego bonito y el tiqui-taca? Sin embargo, en casi la única ocasión en que se acercan al área en el segundo tiempo, aprovechando la debilidad del rival (Carvalho estaba cojo), te clavan el gol y se te queda cara de tonto. Si contásemos el número de ocasiones que han tenido los dos equipos durante cada uno de los partidos, el Madrid habría tenido muchas más. El juego del Barcelona es una provocación constante a que los jugadores entren al trapo y hagan alguna falta fuera de lugar, si no la hacen ya se encargaran ellos de tirarse, gritar y meter al árbitro en apuros. Lo que más admiro del Madrid es esa capacidad de sobreponerse siempre a todo esto, a no perderle la cara a los partidos por difíciles que se pongan (hoy fue siempre por detrás y mantuvo la fe en todo momento) y a soportar y seguir luchando contra todas las circunstancias y mala fortuna a las que se tiene que enfrentar cada vez que juega contra este equipo. Es esa impotencia la que lleva a un jugador como Marcelo, joven e impulsivo, a hacer la entrada que hace, que hay que admitir que está fuera de lugar. Expulsión y punto, pasa en miles de partidos que un jugador del equipo que pierde le dé una patada así a un rival. He jugado al fútbol, no mucho pero lo suficiente como para saber lo que le pasa por la cabeza a un jugador en un momento así, en el que ves que te lo has dejado todo en el campo y aún así estás perdiendo de forma inmerecida. Y la tangana de después es lo que es, a TODOS los integrantes de AMBOS banquillos se les va la pinza y empiezan a empujarse y decirse de todo, para la posteridad quedará que fueron los del Madrid los que empezaron y los que la liaron y que no saben perder. ¿Por qué no son los del Barcelona los que no saben ganar? Yo me lo pregunto, no sé si alguien más se lo cuestionará, pero lo que quedará para hablar esta semana será que Mourinho le metió un dedo en el ojo al segundo entrenador del Barcelona, por supuesto de la colleja que le dio éste después no hablará casi nadie. Y nadie se pregunta qué hizo Tito para que Mourinho le hiciese eso, porque imagino yo que algo haría o diría.

Está claro que desde el momento en que es el Barcelona el que ha ganado la Supercopa ya para la opinión general, la prensa y demás no será un trofeo pequeño, ya es otra victoria sobre el Madrid y a exagerarlo todo, nadie dirá que el Madrid fue superior, pero a nosotros los madridistas nos tiene que dar igual, debemos estar orgullosos de lo que ha hecho nuestro equipo en esta Supercopa y sobre todo, debemos ser optimistas ante la temporada que comenzará en breve. Hay equipo, es mejor que el año pasado y se le puede ganar al Barcelona.

Ah, y lo del rollo de la pretemporada corta me toca la moral, hoy no he visto a nadie del Barcelona arrastrarse por el campo ni dejar de correr, no he visto al enano precisamente falto de forma, las cosas como son, pero bueno, era la excusa perfecta por si perdían y sirve para darse más mérito ahora, no hay más.

Oigo a Joselito Guardiola en rueda de prensa volver a exhibir el “comportamiento modélico y ejemplar” de todo aquel que lleva el escudo del Barcelona en algún sitio, y dice sobre lo del teatro que algún día le harán daño a alguien. Le preguntaría si no pudo hacerle daño Busquets a Xabi Alonso en la final de la Copa del Rey, o Iniesta y Xavi con las entradas que han hecho en la primera parte. Una persona que fue acusada de dopaje y es el jugador más expulsado de la historia de su equipo no es el más indicado para hablar de comportamientos modélicos. Y el mamporro que le han dado a Ozil en la cara no creo que se lo haya dado uno del Madrid precisamente, habrá sido algún modélico…

lunes, 15 de agosto de 2011

Ayer en el Bernabéu

Ayer estuve en el Bernabéu, no voy mucho, bastante menos de lo que me gustaría, por lo que cada vez que voy se convierte en una ocasión especial, y ayer lo fue más porque era un R. Madrid-Barcelona, un partido difícil de olvidar. Me he propuesto escribir lo que fue para mí ese partido sin leer antes ni un solo periódico ni ver imágenes en la tele, hacerme una opinión sin influencias de la prensa, así que allá voy.








Lo primero, el ambiente: espectacular. No hay otra palabra que lo describa mejor. A los que dicen que el Bernabéu es como la ópera o el teatro les habría sentado ayer en mi butaca sólo durante 5 minutos. Hubo un momento de la segunda parte, justo después del empate de Xabi Alonso, que era una caldera. Cada vez que se lanzaba un córner o una falta cerca del área contraria el griterío y los cánticos eran ensordecedores, estoy afónico.  Dudo que por la tele se escuche todo lo que se oye allí, durante prácticamente los 90 minutos se coreó al Madrid y se insultó al Farsa y el árbitro.









Y hablando del árbitro: lamentable. Es verdad que no vi todas las jugadas claramente, puede que jugadas que vi claras allí no lo sean tanto en el televisor, pero si lo de Valdés a Cristiano no fue penalti, yo me tengo que cambiar la graduación de las lentillas, porque ese sí que lo vi clarísimo, tan claro que no me explico como el linier, que estaba al lado, ni el árbitro, lo pudieron ver. Sencillamente no lo entiendo. Después los del Farsa pidieron uno de Marcelo sobre Pedro (creo que fue él, no estoy seguro). No vi bien la jugada y no puedo decir si fue o no fue, pero lo que tengo claro es que si hubiesen pitado el anterior, esa jugada no se habría producido. De todas formas, lo que supongo que quedará hoy en las noticias deportivas y demás serán esas dos jugadas polémicas y lo de Alves (otra vez, cómo puede tener la cara tan dura de venir a reírse del Bernabéu una vez más y hacer el payaso de esa manera. En serio, me parece increíble que lo volviese a hacer y que encima protestase, o es tonto o se fuma algo, no hay más). No se leerá nada sobre lo que yo llamo “las pequeñas cosas”. Y las pequeñas cosas son: lo fácil que es sacar tarjetas al Madrid y lo difícil que es sacárselas al Barcelona, lo fácil que es ver jugadores del Farsa besando el suelo y que siempre les piten falta y lo difícil que es que a los del Madrid se las concedan, las pérdidas de tiempo desde el minuto 1  por parte del Barcelona sin ningún castigo y en resumen, esa sensación que parecen tener sus jugadores de que pueden hacer lo que les dé la gana porque no va a pasar nada. Y hablando de pérdidas de tiempo, me sorprendió muchísimo que desde el 0-0 inicial el Barcelona tardase una eternidad en sacar de puerta, de banda, las faltas… menos mal que son un ejemplo de juego limpio. Ah, y ayer regaron el césped un buen rato, yo lo vi con mis ojitos. Y no soy un experto en la materia, pero no vi la hierba muy alta que digamos, el balón rodaba que daba gusto. Qué excusa pondrán ahora, ¿el balón, la pretemporada o incluso el árbitro (son capaces, está claro)? La pretemporada cada uno la empieza cuando le da la gana y se tiene que atener a las consecuencias, por cierto.



Pero bueno, ahora me voy a centrar en el partido en sí. Está claro que objetivo no puedo ser, pero cualquier persona que lo viese coincidirá en que el Madrid fue mejor y mereció ganar. En la primera parte fue muy superior, pudo marcar algún gol más pero el Barcelona tuvo la suerte de que las dos veces que pasó del medio campo acabaron en gol. Me gustó mucho la actitud del Madrid de no venirse abajo pese al injusto resultado y ese gol que llaman muchos, con acierto, “psicológico” en el minuto 45. Fue el inicio de la segunda parte el peor momento de nuestro equipo. El Barcelona salió a intentar dormir el partido en su campo y buscar largas posesiones para acabar desquiciando al Madrid (tiqui-taca lo llaman algunos, en fin…), pero el Madrid no se rindió y siguió presionando, gracias a un robo de balón logró un corner y de ahí salió el empate. Después los jugadores se vinieron arriba y fue ahí donde la suerte no nos sonrió y las fuerzas fallaron un poco. Hubo ocasiones para haberse puesto por delante, sobre todo ese cabezazo de Benzema (que espectáculo de jugador, y eso que no fue su mejor partido, cuantas alegrías nos va a dar), pero no pudo ser. Nada que reprochar a los jugadores, que lo dieron todo y pusieron contra las cuerdas durante casi los 90 minutos al que supuestamente es el mejor equipo del mundo. El miércoles es la vuelta y el equipo tiene que salir igual que ayer, se les pudo ganar ayer y se les puede ganar el miércoles, no hay ninguna razón para no confiar en este equipo, más bien todo lo contrario.




Ah, y a los puristas de la posesión, el juego y las ocasiones, ayer el Madrid dominó en todo eso, ahora si sois resultadistas, ¿no?






P.D. Se me pusieron los pelos de punta cuando al retirarse Villa del terreno de juego el Bernabéu coreó al unísono el nombre de Raúl. El espíritu del eterno capitán se resiste a abandonar el Bernabéu.

miércoles, 13 de julio de 2011

Hipocresía IV

Millones

El Madrid en los últimos años, sobre todo con Florentino Pérez como presidente, ha hecho muchos fichajes millonarios: Figo, Zidane, Ronaldo, Beckham, Kaka’ o Cristiano Ronaldo, por ejemplo. Es un hecho innegable, se han hecho muchas inversiones en jugadores para intentar lograr los objetivos. Esto ha sido criticado por muchos, que argumentan que el Madrid no debería fichar estrellas sino confiar en la cantera o el “nuevo” argumento de que se revienta el mercado y son fichajes inmorales. Todas esas críticas y pensamientos son respetables en principio, cada uno lo ve de una manera, pero dejan de serlo cuando entran en la contradicción, o cuando se critica lo que hacen unos y no lo que hacen otros. A buen entendedor con pocas palabras le bastan, pero  me voy a explicar de todas formas.

El Barcelona de Rijkaard fue un equipo que ganó la Champions en una ocasión y un par de ligas, un equipo que llegó a considerarse como el nuevo “Dream Team” (la eterna comparación, no sé cuando coño se van a cansar de comparar a todos sus equipos con ese). Para formar ese equipo campeón, el Barcelona hizo una gran inversión en jugadores como Ronaldinho, Eto’o, Giuly o Deco, además de otros jugadores secundarios como Belletti o Sylvinho. Una renovación de plantilla en toda regla, vamos. De eso hoy en día no parece acordarse nadie, porque ahora da la sensación de que ellos han usado ahora y siempre la cantera como única fuente de jugadores, que de su cantera sólo salen estrellas y así ha sido siempre (sus estrellas históricas, como Cruyff, Figo, Ronaldo o Maradona, también eran catalanes y de la Masía, por supuesto). Pero no hace falta irse tan “lejos” en el tiempo para encontrarnos con más mentiras de las que nadie parece darse cuenta. En los últimos tres años, en los que el Barcelona lo ha ganado todo “gracias a su cantera, a los jugadores de la casa” y a todas esas cosas que no se cansan de decir, se han hinchado a fichar jugadores y todo el mundo lo ignora, y además, mientras las críticas se han estado centrando en los fiascos de Kaka’ o Benzema (que ya ha cerrado unas cuantas bocas y me da que va a cerrar más), pocos se han ocupado de hablar de Ibrahimovic o Chygrynskiy. La operación de Eto’o-Ibrahimovic (algunos la cifraban en 65 millones porque decían que Eto’o valía 20(¿?), a mí me daba la risa) es el ejemplo más claro. No sé, evidentemente, lo que pasaba dentro del vestuario, pero no veo al sueco menos conflictivo que a Eto’o, eso para empezar, y siempre he pensado que si el Barcelona no se hubiese desecho de Eto’o, esa temporada habría ganado la Champions de nuevo. De hecho, por casualidades de la vida, Eto’o sí la ganó. Pero bueno, como ahora resulta que es "el equipo de España" y de la humildad y los valores, todo se les puede perdonar.  A lo mejor nos dicen que Abidal, Touré Yaya, Mascherano, Villa, Adriano, Afellay, Maxwell, Milito, Keita o Alves son canteranos y no les han costado dinero y nos lo tenemos que creer.

Ayer salió a la luz el fichaje de Alexis por el Barcelona por unos 40 millones de euros, ellos dicen 27+variables, pero teniendo en cuenta que las variables dependen de si juegan la Champions los 5 próximos años, serán 40 (aunque ojalá no tuviesen que pagar muchas variables, no sería mala señal). El caso es que este año, el pichichi de 2ª división ha sido un tal Jonathan Soriano, del Barcelona B. Y yo me pregunto: ¿si tanto confían en la cantera, cómo fichan a Alexis en lugar de darle una oportunidad a este chaval?  A lo mejor resulta que yo soy imbécil, pero hay algo que no me cuadra en su política de canteranos.

Y, además, los datos objetivos de los tres últimos veranos (sin contar éste), nos dicen que en dos de ellos el Barcelona gastó más dinero que el Madrid en fichajes, sólo en el primer año de la vuelta de Florentino gastó más el Madrid. El Madrid en total ha gastado más (la diferencia la marca el fichaje de Cristiano Ronaldo por 94 millones), pero no tanto más como nos quieren hacer creer. Y este verano está por ver lo que pasará al final, pero en caso de que el Madrid no fiche ni a Neymar ni a Agüero, muy probablemente el Barcelona vuelva a gastar más dinero, y… ¿entonces  qué?