miércoles, 7 de noviembre de 2012

De menos a más

Partido de Liga de Campeones. Partido ante un gran equipo, con un muy buen entrenador. Para mí las claves fueron las siguientes:

1) La presión inteligente de los alemanes desarboló en la primera parte a un Madrid que echa mucho de menos a Khedira cuando se plantea lucha en el centro del campo. El Borussia defendió muy bien y tiene un gran contragolpe. Lewandowski hizo mucho daño de espaldas a la portería.


2) Los errores en defensa cuestan muy caros. Esto es la Champions, y lo normal es jugar con grandes equipos que no te perdonen. El segundo gol es de esos que "no te pueden" marcar. En el minuto 45, un saque largo del portero no debe acabar nunca en gol. Falta de concentración.


3) El efecto más perjudicial que tienen las bajas del Madrid en defensa es que Sergio Ramos tiene que jugar de lateral. Para mí es el segundo mejor central del mundo tras Pepe, pero en el lateral está tan desdibujado en defensa y tan fallón en ataque que resta más que suma. No entiendo como pudo jugar tantos años ahí.




4) Essien. Para mí debió ser titular, pero es fácil decirlo hoy, y más después de ver el partidazo que se marcó. El mejor del partido en mi opinión, lo cambió. Recibirá críticas esta temporada porque es lo que tiene ser un fichaje de Mou y no ser "un jugón" (el partido de ayer es una muestra de que muchas veces, casi siempre, poner 3 ó 4 "jugones" no es la solución), pero sus participaciones en el equipo han sido un ejemplo se profesionalidad, sacrificio y calidad. Debería llevar aquí 10 años.


5) La afición. No estuvo mal el Bernabéu para como suele estarlo. Por lo general, la afición no perdió la fe en el equipo en ningún momento. Aún así, comparar a los 70.000 madridistas que podría haber en el estadio con el puñado de alemanes apiñados en el fondo norte es sonrojante. Cuestión de culturas, supongo, pero me encantaría que algún día el Bernabéu fuese un estadio en el que al menos la mitad de los espectadores animasen lo que animan aficiones como la del Borussia. 

Mención aparte tienen los aficionados madridistas que vi desfilar abandonando el estadio a mi alrededor en el minuto 85. Son una lacra. El gol de Özil se lo perdieron, pero supongo que al menos no pillarían atasco. Esos son los que forman ese pequeño sector de la grada que silba a Cristiano si falla dos ocasiones seguidas y si Casillas hace dos cantadas y después un paradón gritan "Iker, Iker, Iker". Los borreguitos de As y Marca. Los malditos piperos.





6) Por último, la fe de este equipo. La confianza en sus principios y en lo que hacen pese a tener todo en contra. Empezar una segunda parte perdiendo 1-2, sin delanteros, ante un gran rival, con la necesidad de ganar o de al menos no perder y conseguir darle la vuelta a la tortilla solo puede lograrse si se tiene confianza en lo que se hace. Este equipo puede dar más, lo vimos el año pasado, pero la temporada está siendo un reflejo del partido de ayer: De menos a más. Cuando vayan recuperándose los lesionados (y dejen de lesionarse más) y el equipo llegue a su cima física, esto será otra historia. La temporada promete, promete de verdad.


PD: ARBELOA CAPITÁN.

1 comentario:

  1. Impresionante la posdata, has leído al cortador del césped hoy, no deja títere con cabeza. Pienso como tú pero es que ayer desde el campo se vio algo que no había visto yo nunca, pasividad, mal acierto y vulgaridad en el juego

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