viernes, 24 de mayo de 2013

Vergüenza


Estos tres años he leído y escuchado comentarios de madridistas como "me da vergüenza tener un entrenador como Mourinho que mete dedos en los ojos", "me da vergüenza que el Madrid no juegue nada con Mourinho" y cosas por el estilo.
Bueno, yo también soy madridista y voy a decir lo que a mí me da vergüenza:


Me da vergüenza que durante tres años se haya pitado (ocasionalmente al principio, con regularidad desde hace meses) en el estadio de mi equipo a un entrenador que, entre otras cosas, ha devuelto al Madrid a la élite del fútbol mundial, de la que a muchos se les ha olvidado que habíamos salido tras años de pésima gestión deportiva.

Me da vergüenza que el mejor entrenador del mundo tenga que abandonar mi equipo por presiones de la prensa con el consentimiento de afición y presidente.

Me da vergüenza que el capitán de mi equipo lo único que haya capitaneado sea una revuelta en el vestuario para hacer la cama a su entrenador durante meses.

Me da vergüenza que el capitán de mi equipo le cuente a su novia periodista las interioridades del vestuario y ésta las aireé en directo en televisión (28/1/2013: "El clima dentro del vestuario del Madrid como sabéis todos no es bueno y es "vox populi" que los jugadores no comulgan para nada con Mourinho. Ahora mismo hay división en el vestuario y Mourinho tiene muchos frentes abiertos en el Real Madrid").

Me da vergüenza que en las gradas del Bernabéu se pite a los jugadores a los que se critica en As y Marca sin atender a su rendimiento deportivo.

Me da vergüenza que el presidente del Real Madrid consienta ataques mediáticos contra empleados del club y además invite a comer a periodistas en Navidad y les permita vender "el pijama del Madrid" con el periódico.

Me da vergüenza que el Real Madrid como club ceda constantemente a chantajes y presiones exteriores, sin limitarse a mirar por sus intereses.

Me da vergüenza que se planteé la posibilidad de que el Real Madrid pida a José Mourinho no comparecer en rueda de prensa en el tiempo que le queda como entrenador del equipo.

Me da vergüenza que en la revista oficial del Real Madrid de marzo-mayo (90 páginas) no haya ni una sola foto de Mourinho y apenas un par de menciones, cuando éste ha estado tres años partiéndose la cara por el club.

Me da vergüenza que un entrenador no pueda durar más de tres años en mi equipo porque As y Marca decidan hacer campañas en contra del entrenador de turno y los aficionados les sigan el juego como marionetas.

Me da vergüenza que en el Real Madrid se ningunée a profesionales del fútbol de élite que serían indiscutibles en cualquier otro club del mundo.

Me da vergüenza que en el Bernabéu se haya aplaudido a Xavi Hernández o a Silva "por campeones del mundo".

Me da vergüenza Roncero y quienes le ríen las gracias.

Me da vergüenza que haya muchos socios del Real Madrid descontentos con la gestión actual de Florentino y se vean obligados a votarle porque de lo contrario el club caería en manos de alguien peor.

Me da vergüenza que la afición del Real Madrid no se dé cuenta de que el mayor enemigo del equipo no es el Barcelona sino su entorno.

Me da vergüenza que se desprecien los verdaderos valores del Real Madrid, los de Don Santiago Bernabéu, que son radicalmente opuestos al señorío y la humildad mal entendida que nos venden ahora.


En definitiva, me da vergüenza la situación actual del Real Madrid, no que en un lance de un partido un jugador de una patada a otro o un entrenador le meta el dedo en el ojo al rival.

sábado, 18 de mayo de 2013

Se acabó


Parece ser que se acabó la era Mou en el Real Madrid y no lo ha podido hacer de una forma más dolorosa. La final de Copa se perdió por muchas cosas, pero principalmente porque el fútbol es hacer, no merecer. Lo siento especialmente por Diego López, que merecía dejar su huella siendo partícipe en un título con el equipo de su vida y que en estos meses ha defendido la portería de una forma más que notable, pese a ser ninguneado y maltratado mediáticamente por tener la desgracia de ser del agrado del odiado Mourinho y dejar en el banquillo al niño bonito de la prensa española. Un ejemplo de profesionalidad y compromiso que quedará en el olvido de muchos. No en el mío.

El Real Madrid de Mourinho se ha quedado muchas veces en el "casi" estos tres años. Tres semifinales de Champions perdidas decididas por detalles y esta final, en la que habría sido difícil tener peor suerte. A este equipo le ha faltado una pizca de madurez para convertirse en legendario. Y suerte, porque con la suerte en contra es muy difícil ganar, y pocas veces ha estado de cara en los últimos tres años. 

Pero esta no es la peor derrota del Real Madrid esta temporada. Ni haber perdido la Liga, ni la Copa de Europa. No, la mayor de las derrotas es haber perdido, como todo parece indicar, este proyecto. Doy por hecho que José Mourinho no continuará siendo el entrenador del Real Madrid y es normal, no tiene por qué aguantar tanto a cambio de tan poco. El acoso mediático al que ha sido sometido estos tres años es algo sin precedentes en el mundo del deporte. Vergonzoso, lamentable, vomitivo, repugnante. De vergüenza ajena. Y la pasividad del club ante esto, muy triste. Siempre le agradeceré haberme brindado los tres años de madridismo más salvaje de mi vida. Cuando llegó y vi su forma de hacer las cosas, tan distinta a la que nos tenía acostumbrados el Real Madrid en los años anteriores, pensé que significaría un cambio de rumbo, pero parece que sólo se ha quedado en un paréntesis. 




Es como si este año el fútbol hubiese puesto a prueba al club. Un reto: "a ver si sois capaces de mantener vuestro proyecto y una idea que sabéis ganadora pese a terminar la temporada sin títulos". Haberlo hecho habría sido crecer mucho como club, pero no va a ser así. Si el Real Madrid quiere volver a ser lo que un día (ya por desgracia muy lejano) fue, tiene que plantearse muchas cosas. Institucionalmente no pintamos nada y no se hace nada por evitarlo. No se pueden consentir arbitrajes como el de ayer, y lo malo es que se han consentido muchísimos en los últimos años. No se puede consentir que los medios de comunicación tengan barra libre para despellejar a empleados del club públicamente y permanecer inmóviles mientras adoctrinan al sector manipulable de la afición, que tiene mención aparte y una gran parte de culpa en los males del Real Madrid. No se puede pretender crecer sin adaptarse a los tiempos. Fuimos el mejor club del siglo XX, pero llevamos 13 años en el siglo XXI y el fútbol, como el mundo, ha cambiado mucho. O evolucionamos o morimos, y por desgracia vamos más encaminados a lo segundo. Estos tres años hemos visto la luz, pero por desgracia cuando el sabio apuntaba hacia la Luna, la mayoría se quedó mirando el dedo.

Una lástima. Habrá que ver qué pasa ahora, pero no puedo evitar que la tristeza por el fin de un proyecto que sé que de haberse concluido en 2016 lo habría hecho triunfalmente, me haga ser pesimista. Han ganado los malos. El horizonte lo veo negro, ser del Madrid es levantarse siempre, pero si todo va por los derroteros por los que parece que irá, nos tocará revolcarnos mucho por el suelo.


Pero bueno, aquí estaremos. Hala Madrid.

martes, 14 de mayo de 2013

Según sople el viento


En varias ocasiones a lo largo de esta temporada desde el Diario As se ha utilizado la figura de Vicente Del Bosque como un medio más en su campaña contra José Mourinho. Que si Mou no fue a la gala del Balón de Oro, que si Mou dijo que los votos de dicho premio estaban manipulados "desprestigiando el premio a Del Bosque", que si Mou no mencionó en rueda de prensa que Del Bosque ganó dos Champions con el Madrid... Todo son halagos a Del Bosque, y cuanto más daño pueda hacer a la imagen del todavía entrenador del Real Madrid, más se exagera en la exaltación de la figura del marqués. 

Pero esto no siempre fue así, no siempre les gustó Del Bosque y no siempre le dedicaron los halagos de ahora. Se le llamaba "alineador" (Tomás Guasch en las páginas de As) y hay unos cuantos editoriales del director del periódico, Alfredo Relaño, en los que le atizaba sin contemplaciones. Especialmente éste, pero algunos más como éste, éste o éste otro. En el último habla sobre la final de la Novena, y también habló  poco después de ella en la grabación de un reportaje sobre dicho título. Hace unas semanas Teledeporte emitió un documental sobre las nueve Copas de Europa del Real Madrid en el cual se incluía esa entrevista a Relaño. Me molesté en buscar el vídeo y extraer ese fragmento porque lo que dice no tiene desperdicio. Sirve para hacerse una idea una vez más de cómo se las gasta este personaje, por si alguien no lo había hecho ya.





"Fue un partido que al Madrid no le añadió una gran gloria". (¿Gloria por ganar una final de Copa de Europa? Qué va, hombre)
"Es una victoria un poquito vergonzante para el Madrid". (El madridismo no la celebró, nos quedamos todos tristes en casa muertos de tristeza y vergüenza)
"El Madrid consigue una victoria a la contra, escatimando esfuerzos, jugando con la calidad de sus jugadores". (Cómo osaron jugar con la calidad de sus jugadores, qué barbaridad, a quién se le ocurre aprovechar la calidad de Zidane).


Y después de esto tiene la cara dura de recriminar a Mourinho no estar recordando constantemente todos los títulos que ganó Del Bosque en el Real Madrid. En fin, sobran las palabras.